jueves, 7 de noviembre de 2013

Crónica 19ª edición 1ª Maratón de Montaña de Catalunya By Raül

Como objetivo del 3er aniversario de mi nueva vida decidí proponerme un nuevo reto…. Una maratón de montaña.
Como bien sabéis los que me conocéis, el próximo 23 de Noviembre será el 3er aniversario de operación del Bypass  gástrico. La reducción de estómago. Desde aquel día he perdido el 50% del peso que tenía, 75kg. Y gracias a unos buenos amigos me inculcaron la pasión por el Running.
Pues bien. Después de casi dos años y medio “runenando” por calles, ciudades y montañas y con cerca de 4.300 km entre entrenamientos y carreras, incluyendo la maratón de BCN del 2013, decidí correr la Maratón de montaña de Sant Llorenç Savall.
No era mi primera carrera de montaña, ya que he corrido alguna media, 2 veces la Kumunpaca de Sant Sadurní, la MontNegre d’Arenys y diversas de 15 km como la UT Vall d’Aran, la Bosc Carlac o la Pujada a Cadafalch. Cuál de ellas con menor desnivel. Pero si que era mi carrera de mayor distancia en montaña. Una Maratón.
Me hacía especial ilusión correr esta maratón, ya que gran parte del recorrido es por donde suelo salir a entrenar por montes, senderos y caminos. Sant Llorenç del Munt i la Serra de l’Obac. Soy rural, más que de asfalto.
Todo esto empieza, como cualquier otra maratón, entre 10-12 semanas antes, con un plan específico gracias a la ayuda inestimable del Gran Pep. Entrenos por Collserola, el Rio Ripoll, Viladecavalls, La Pastora, Ida y vuelta a Mura. Creo que me conozco casi todos los caminos y senderos de 30 km a la redonda. Además de mis entrenos de Madrugada por Terrassa.
Después de realizar 30km de tirada larga 3 semanas antes con Pep inspeccionando parte del recorrido, el sábado anterior vamos a comprobar con toda la afición los puntos de animación a los cuales podían acudir. Ellos también hicieron su particular maratón. Gracias por esos ánimos.

Me había preparado la carrera dividida en diferentes segmentos atendiendo al desnivel y al tiempo medio que solía hacer en los entrenos y carreras previas de montaña.
La Maratón la había dividido en  6 parciales, coincidiendo con los puntos donde estarían Anna, los niños, mis sobrinos, etc… en fin donde tendría los ánimos de la afición.
La idea era pasar por la Vall d’Horta, Km 7,3 aprox. en 0:49:00, por la Ermita de les Arenes, Km 17 en 2:05:00, por Matadepera, justo al final de la urbanización, Km 22 en 3:02:00. Coronar La Mola, Km 24,5 en 3:30:00. Pasar por el Coll d’Eres, Km 28,5 en 3:58:00 y llegar a Meta en 5:40:45. Esta era la previsión, sin contar con las paradas de los avituallamientos. Nada más lejos de la realidad.
Los días previos había tenido molestias en la ingle y en la rodilla derecha. Me preocupaba lo de la rodilla.
Llega el día de Autos. Cambio de hora. Entre los nervios habituales previos a la carrera y el cambio horario, a las 3:30am estaba con los ojos como platos. No varío el ritual. Ducha, desayuno tipo (tostada con un poco de pavo, zumo, algo de fruta y café)
Salgo de casa y puntualmente recojo a mi hermano a las 5:00am y nos vamos para Sant Llorenç ya que a las 6:00am inician la entrega de dorsales.
Al Llegar a Sant Llorenç, aparcamos estratégicamente y nos dirigimos hacia el pabellón donde recojo el dorsal. El 719. Me gusta. Tomamos  el café previo viendo el final de MotoGp.

 6:45am. Empiezo el calentamiento dirigiéndonos hacia la salida. Mucha gente. Todos saludándose. El ambiente en carreras de montaña, nada tiene que ver con las de asfalto. Parece que se conocen todos. Hasta yo saludo tímidamente a un par de chicos que me suenan de alguna cursa previa.
Entramos en la zona de control, marcando con el xip de la muñeca. Ahora sí que sí. Mi hermano en el otro lado del rio, se coloca para la foto de la salida. La última arenga y con una puntualidad británica a la 7:15 dan el pistoletazo de salida.

Por la hora que es, no hace frío. Debemos estar sobre los 18ºC – 19ºC. La salida es cuesta arriba y estoy en la parte delantera. Me pasan muchos corredores, pues intento salir muy tranquilo y regular desde el principio.
La primera parte vamos por un terreno fácil. Son 3km, planos con algún pequeño desnivel. Voy asentándome en la carrera y después de una fuerte subida llegamos al primer avituallamiento. Me he propuesto, hidratarme bien y parar, aunque sea poquito, en cada uno de ellos. Bebo agua, un trocito de fruta, naranja creo recordar y seguimos.
Pasado el avituallamiento una fuerte pendiente nos lleva hacia la riera. Aquí el camino se aplana y entramos en estrechos senderos cruzando la riera a banda y banda.
Todos los corredores vamos en fila en este punto y a buen ritmo. No me siento nada mal aunque vamos bastante más rápido que mi previsión. Es un tramo muy divertido, para entrar en la Vall d’Horta.


Nada más cruzar el puente de la carretera por debajo, siento a lo lejos unos gritos de ánimo e identifico al Roger, al Miquel y al Nil, aunque todavía quedan unos 200m para que puedan verme, al otro lado del pequeño valle.
Este es el primer punto de referencia con el tiempo previsto. Paso en 0:39:31. Bastante más rápido de lo que pensaba. Esta parte del recorrido no la conocía y era bastante más rápida que lo que interpreté en la altimetría. Sólo había una subida fuerte. La anterior al primer avituallamiento.
Paso por delante de la afición que me da un “subidón” de adrenalina. El mejor avituallamiento posible. Sobretodo Alba, con su Pancarta de ánimo. Genial!!
Pasado este punto, justo cruzando la pista que lleva a la urbanización, encaramos la primera subida fuerte a “4 manos”. Como el desnivel es importante, el paso estrecho y hay que ayudarse con las manos, la aglomeración de corredores, provoca un tapón que nos obliga andar por primera vez. Va bien porque inconscientemente hace que te regules.

Saliendo de aquí, cogemos un recorrido entre pista y senderos, de fuerte subida hasta llegar al Coll del Gavatx, Km 10,5 aproximadamente, donde se encuentra el primer control de tiempo. 1:07:52. Ahora sólo quedaba medio kilómetro de subida. Al coronar el pico, km 11, habíamos acumulado un desnivel +421m y -197m en estos 11km
Seguía parando en todos los avituallamientos, bebiendo agua y comiendo fruta. Tengo molestias en la rodilla, sobre todo en los tramos de bajada, aunque en ese momento no creía que fuera muy importante.
 Encaramos un fuerte descenso de 1km aproximadamente y el terreno empieza a llanear, lo que facilita que puedas correr tranquilamente. Me gusta y cojo un ritmo cómodo.
El recorrido va bajando poco a poco hasta encarar la riera que nos llevará hasta la Ermita de las Arenas. Durante todo el recorrido de la riera, lidero un grupo de 6 ó 7 corredores, que me hacen aumentar el ritmo de zancada, aunque voy muy cómodo y descansado. Les estoy haciendo de liebre, ya que me aparto un par de veces pero no me adelantan.
Llego al siguiente punto importante del recorrido. El Pla de l’Ermita De Les Arenes. Allí tengo de nuevo a la afición que no dejan de animar. Hay corredores que me comentan  la suerte que tengo, pues ya los han visto también en el punto anterior.
Este es otro de los puntos de referencia que tenía. Paso por la Ermita en 1:40:01, más de veinte minutos por debajo de lo previsto. Aunque la previsión era muy teórica, pues no había hecho antes nada igual, creo que el encontrarme tan bien en esta parte fue una de los motivos que me pasaron factura posteriormente.


Nada más pasar la Ermita, giramos a la derecha e iniciamos un leve descenso hasta el próximo avituallamiento. Debo decir que uno de los puntos fuertes de esta carrera son la cantidad de avituallamientos y lo surtidos que son (Agua, bebida isotónica, coca-cola, fruta, frutos secos y membrillo). Aquí aprovecho y tomo otro “chute”. Me tomo otro gel de los que llevaba. A partir de aquí empieza la parte dura de la carrera (o eso es lo que yo pensaba). La subida a La Mola.
Saliendo del punto de control, empieza la temible subida. Encaro un primer tramo de 3 km con un desnivel acumulado de +325m y -5m. Me lo tomo con calma y supero estos 3 kilómetros en poco más de media hora. Vamos por unos increíbles caminos con vistas impresionantes de La Mola y todos sus alrededores. El paraje es idílico para correr por la montaña.
Pasamos por el Coll de Grua, llegando a una pista con un falso llano, que te permite recuperar ritmos y piernas antes de encarar los 2,5 kilómetros finales de subida a La Mola.
Voy con un grupo de 5 ó 6 corredores circulando por senderos en fila de a uno. Llevamos un ritmo vivo, pero cómodo. El recorrido es muy divertido, con giros, ramas, piedras, pequeños saltos,  etc. Voy disfrutando mucho y sin notar sensación de cansancio en ningún momento. La rodilla sigue molestando, pero no demasiado.
Poco antes de un giro de 180º llegando a Matadepera, nos adelantan un grupo de 4 corredores de un mismo equipo. Se les ve bien.
Empieza la subida y minutos después llego a la casa de los depósitos. Otra de las referencias en tiempo que tenía y donde supuestamente iba a estar mi hermano. Llego en 2:30:35. Vamos bien y rápido, pienso.
Esta parte del recorrido la tenía muy presente. La había subido y bajado la semana anterior. Sabía que es una subida exigente y tenía previstos 4 tramos en los cuales los haría andando. En esta parte, entre la gente que pasea (los domingos por la mañana, subir a La Mola es el deporte nacional. Parece el Metro en hora punta) y mortadela que desayuno, voy a buen ritmo de subida sin darme apenas cuenta. Voy pensando dónde estará mi hermano. Sé que dijo que intentaría subir hasta la cima, pero que no lo veía muy factible.
Aunque mantengo los tramos previstos andando, el ritmo de subida es elevado. Se agradece como animan todos los “domingueros” que a esa hora van de excursión. Reconforta y te da fuerzas para seguir subiendo.
Superado el último tramo de escaleras del Camí dels Monjos, justo al girar a la derecha para encarar  los últimos 300mts antes de llegar al santuario, veo a mi hermano.¡¡¡ Ha llegado hasta arriba!!!
Me anima, me hace 4 fotos, y se pone a mi lado a grabarme con el móvil. No me queda más remedio que seguir corriendo.
Juntos coronamos La Mola. Marco en el control de tiempo en 3:02:44. Sorpresa mayúscula al encontrarme a Javi Pérez en la cima. Me comentó que miraría de estar, aunque trabajando toda la noche no lo tenía muy claro. Vino sin dormir a animarme. Muchas gracias. Toca hidratarse y comer algo de fruta.


Llego con molestias en el Isquio, nada que no haya soportado en todas las carreras desde la Maratón de BCN, y la rodilla sigue haciendo de las suyas. No es un dolor fuerte, es más una leve molestia pero continua.
Vuelvo a beber algo de isotónica, como naranja y par de trozos de plátano. Me despido y a empezar el descenso.
Después del leve descanso, empiezo el tramo que quizás haya hecho más desde que entreno por la montaña. La Carena del Pagès, que une La Mola y el Montcau llegando al Coll d’Eres, próximo punto de control y último donde tendré a la afición animándome. Conozco cada uno de los árboles, cada una de las piedras del camino, cada uno de los giros, donde apoyar el pie, por donde dar la zancada para que me penalice lo menos posible…. En fin es mi lugar de entrenamiento.
Iniciamos el descenso unos 10 corredores, 3 de ellos delante mío. Antes de llegar al primer descenso técnico ya me habían dejado pasar. Llegamos al Morall del Drac y después de superar esta primera parte técnica, veo que ya les he sacado unos 100mts.
Voy a un ritmo tranquilo, todavía me queda la mitad de la carrera. Sé que hay 2 rampas fuertes. Sigo a mi ritmo y no me sigue nadie. Voy más lento que de costumbre por esos caminos, pero nunca he llegado con 25km recorrido y con 20 más por recorrer. Sigo disfrutando del descenso y cada vez que paso por algún excursionista, no dejan de gritarte y animarte. Gusta mucho.
Diviso el Montcau. Hago la última bajada y en poco más de media hora llego al Coll d’Eres. Veo al final al Roger y a la Alba que chillan anunciando mi llegada. 3:34:51. Llevo 25 minutos de margen.
Paro a recuperar fuerzas. No paran de hacerme fotos, mi madre gravando y el Nil indicándome el camino. El Miquel emocionadísimo. No pronunciaba palabra. Todos animándome. Que suerte tengo.
Vuelvo a beber y tomar algo más de fruta. Aprovecho para darme un poco de Radio Salil. Empiezo a notar los gemelos algo cargados y por supuesto mí querida rodilla.



Me despido de la afición que tan fervientemente me ha estado animando para encarar los últimos 14 kilómetros hasta la meta. Este tramo lo desconocía por completo y me sorprendió por su belleza pero sobre todo por su dureza. Aquí acabó lo divertido de la carrera.
Empiezo el descenso por la Canal del Llor. Un descenso muy fuerte, pronunciado, pero sobretodo muy técnico. El cual te exigía una fuerza de piernas, que yo ya no tenía en ese momento, aunque no lo sabía. Por desconocimiento del recorrido, y la predisposición de que es bajada, la voy haciendo muy rápida. Es una bajada en la cual debes estar muy atento, para no dejarte un tobillo o comerte una rama.
A mitad de la canal, hay giro de izquierdas y encaras un pequeño sendero que permite correr durante un centenar de metros, pero seguidamente, un giro a la derecha me hace enfilar una trialera de muy fuerte bajada, con grandes saltos. Llegado al fondo del “pozo”, cogemos una pista cerca de Marquet de les Roques, donde se encuentra en próximo punto de control.  Hemos hecho 2 kilómetros de descenso con un acumulado de +0m y -353m. Durísimo.
Antes de llegar a la Masía, atiendo a un chico con rampas. Le ayudo a estirar y pienso que yo estoy peor que él. La bajada me ha dejado con las piernas totalmente vacías. La rodilla me molesta y me duelen mucho los tobillos. En ese momento pienso en que no puedo continuar corriendo y todavía me quedan 12km!!
En el avituallamiento, como fruta, bebo un par de vasos de agua y veo a una chica con 2 botes de Réflex. Me cede uno amablemente y  descargo gran cantidad en mi rodilla y mis tobillos.
Inicio los 12 últimos kilómetros, unos kilómetros realmente duros, con 2 rampas de las que hacen sufrir. Y si normalmente se sufren, ni os cuento después de 30km y las piernas totalmente vacías.
La primera parte es un rompe-piernas, con la primera rampa realmente dura donde debes trepar a “4 manos” parte de la subida. Seguido, hay un sendero increíblemente bello por una carena, con subidas, bajadas, saltos, alguna trialera, y descensos de arena donde lo más sencillo es resbalar y caer rodando ladera abajo.
Pasado un castillo en ruina, llegamos a siguiente avituallamiento. Pensaba que había pasado lo peor, pero para mi desgracia, todavía no habían acabado las sorpresas. Enfilamos una pista y seguidamente un sendero de 1 kilómetro y medio con un desnivel acumulado de +192m y -53m. Según el Garming estamos en el kilómetro 35,5 y no diviso población alguna y eso que estamos a una altura considerable viendo casi todo el valle. No consigo coger una referencia de lo que puede quedar de carrera.
Poco después llegamos al punto de control de tiempo. 4:41:04. Me quedan 7km aproximadamente. Si fueran completamente planos y no tuviera 35km por montaña en las piernas, en menos de 35’ estaba hecho, pero……
Mis compañeros de travesía que llegamos a este punto, no van mucho mejor que yo. Aquí estaba completamente roto de piernas, así que cojo un ritmo de trote cochinero. Esta parte es un recorrido cómodo, algo rompe-piernas, donde en cada pequeña cuesta es un suplicio y debo hacerla andando.
Sorprendentemente, sólo me adelantan 4  ó 5 corredores hasta que consigo llegar al avituallamiento del kilómetro 38,5 con más pena que gloria. Aquí llegamos escalonadamente un grupito de 5 corredores el cual lideraba yo. Increíble pero cierto. Paro un buen rato a descansar. Ellos beben algo rápido y prosiguen la carrera. Yo descanso unos minutos. Las piernas ya no van. Creo que no puedo ni andar. Envío un mensaje a mi hermano, pues con las referencias de tiempos que llevaba, seguro que ya me esperan. Llevo 5h15’ de carrera y me quedan 4km. 4kilómetros de auténtico infierno.
Mentalmente fuerte. De cansancio físico, lo normal después de 38km. Pero sin piernas. Toca tirar de orgullo y cabeza.
Inicio la parte final por una subida medio asfaltada. Voy por pista, caminos y senderos. A la más leve subida, la debo hacer andando. Llego a un cruce con un inmenso depósito donde una persona de la organización me dice que en 500m estoy en el pueblo. Es una larga bajada. Me dejo llevar y parece increíble lo que uno puede correr en ese momento.
Justo antes de cruzar la carretera, veo a mi hermano, que le han hecho salir a mi encuentro. Se pone a mi lado y todavía tengo fuerzas para explicarle mientras corremos hacia el pueblo, lo duro de los últimos 14 kilómetros con sus 2 puertos de montaña incluidos. Ya veo la meta. Y a toda la familia. Veo a los niños. Roger, Miquel, Alba y Nil. También mi cuñada grita.
Anna no sabe si gritar, hacer fotos o correr. Veo la preocupación en su cara. La miro con cariño. Lo siento.
A los que no veo en un principio son a mis padres. Deben estar escondidos por la preocupación. Cojo a los niños y entro feliz y emocionado a meta 5h 57’ 26” después.
 

 
Vuelvo a ser Finisher en una maratón. Y de montaña. Soy feliz haciendo lo que hago y soy feliz porque a las personas que quiero, me apoyan en esto.
Hace tres años no podía cruzar la calle sin ahogarme y parar a descansar. Ahora, 75kg después, he acabado una maratón de montaña en menos de 6 horas.
Gracias.
Un ex obeso mórbido, Runner y Maratoniano.

viernes, 19 de abril de 2013

Maratón de París. 7/4/2013 by Carlos


Crónica de la Maratón de París:

Después de llegar el sábado a París, mi objetivo era descansar, hincharse de pasta y poder dormir lo mejor posible esa noche en el lujoso hotel de 5 estrellas que había reservado, y en el que hasta a Torrente le saldrían sarpullidos. Descanso un poco y después de ir al súper en previsión de que a las 6 de la mañana no habrá nada abierto al día siguiente para desayunar, cena con los Prado-Morales y a la cama. Pep me da mi dorsal y ¡ZASCAAAAAA! primer chasco, no sé cómo lo he hecho, o lo han hecho, pero para esta carrera seré don "Glycerin 9" :-$. Empezamos bien...

A la mañana siguiente suena bien pronto el despertador, aunque bien bien no sé para qué, porque mi triste desayuno consta de 3 galletas pequeñas, un sorbo de agua y media manzana, ideal para correr una maratón, pero bueno, es lo que hay. Siguiendo los consejos de Raül, llevo dos días sin probar la leche esperando que así no haya parada en boxes en medio de la carrera, lo que también evito comiéndome la manzana.

Ropa, bolsa y listos para coger el metro hacia la estación donde me espera Pep. En la calle un frío de la leche, por lo que me planteo correr con la camiseta de Nassos debajo de la de manga corta. Justo en el momento de dejar la bolsa decido que mejor correr sin ella, buena decisión ya que creo que me habría sobrado en la parte final de la carrera.

Una vez con Pep, buscamos desesperadamente un lugar donde seguir con el ritual (que yo ya he roto) y un nuevo chasco, no hay casi nada abierto a esas horas, por lo que hoy tampoco hay café para correr. Vamos bien, ni tostadas, ni café, ni nada de lo de siempre, pero bueno, hemos venido a correr, así que después de demostrar lo civilizados que somos los runners (exhibiendo los miembros a la gente que pasaba, meando y creando ríos de pis por las calles, escupiendo, tirando mocos, y un largo etc.), nos dirigimos a los cajones de salida, Pep al de Preferente y yo al de 3:15.

Una vez allí repaso mentalmente al táctica y que no es otra que la misma que tan bien me funcionó en Barcelona, ritmo 3-4 segundos por encima del objetivo en la primera media que es más en bajada, para en la segunda mitad de la carrera poderlos gestionar. En la muñeca los tiempos de paso mínimo y máximo, o lo que es lo mismo, 3:20h y 3:25h y en mi mente el objetivo que más me creo de 3:24 aproximadamente.

En la salida, después de hablar con un francés y una canadiense, concentración, última revisión del estado del cuerpo y disparo de salida, aunque hasta pasados 6 minutos no consigo pasar por la alfombrilla de salida.



Nada más empezar, cuando apenas llevo 500m, veo que se pone a mi lado la chica canadiense, por lo que hacemos juntos aproximadamente 1 km antes de preguntarle por su objetivo. 3:13 me contesta, así que después de decirle que el mío era 3:24, le comento que no me sirve (con otras palabras, claro, y en inglés) e intento separarme de ella para evitar ir a un ritmo más rápido del debido. Por suerte me separé a tiempo porque viendo el tiempo final (no es que mirara el dorsal para aseguarme, ojo ;-)),veo que se cascó un 3:15, así que hice bien (1ª sabia decisión)

Ya en los primeros km me doy cuenta de que voy más rápido de lo previsto (4:37, 4:36, 4:41, 4:38), por lo que intento frenar la pasión de la salida aunque pocos km después vuelvo a hacer 2 km seguidos en 4:33. Las sensaciones son bastante buenas, ligerísima molestia en el tobillo, la espinilla apenas duele, así que vamos bien.



Paso el km 10 en 46:42, 38 segundos más rápido que el ritmo para 3:20 (47:20), pero las sensaciones son bastante buenas, no me noto forzado así que no me preocupo demasiado, más tiempo de margen para gestionar. Una cosa que me pasa cada 5 km y de eso os doy mi palabra, es que recibía un subidón como no os podéis imaginar al saber que tanto mi familia como vosotros os ibais enterar del tiempo. Ahora escrito parece una chorrada, pero en la carrera es algo realmente motivador. 

Al cruzar el arco de los 10 Km, oigo voces españolas a mi lado, por lo que me giro y me encuentro con 3 gallegos de Ourense cascando y diciendo chorradas, por lo que me presento y les comento si les importa si me uno a ellos. "No hay problema, cuantos más seamos, más nos reiremos", así que empiezo a chupar rueda y a hablar con los tres. Mientras vamos corriendo, nos presentamos, me comentan que el año pasado hicieron Barcelona y que uno de ellos se estrena en la maratón. La verdad es que me doy cuenta de que voy bien porque vamos hablando bastante rato y no noto mucho cansancio. Los tres son unos cachondos, van diciendo chistes todo el rato, presentándose a alguien si veían que llevaba una camiseta de Ourense, hablando con otros españoles, etc.

Dos de ellos se separan un poco mientras me quedo con el tercero, el debutante, que me explica que los otros dos le hacen de liebre aunque están un poco zumbados y que lo llevan más rápido de lo acordado (uno de ellos es su hermano y siempre van picados en las carreras porque hacen los mismos tiempos), por lo que los va frenando continuamente. Aún así, 4:33, 4:33 me salen los dos km que hago junto a ellos, por lo que vuelven a saltar las señales de alarma y tras consultar sus tiempos de media (1:29), les digo que me sabe mal pero que mejor hagan su carrera que yo no quiero poner en peligro la mía (2ª decisión sabia).

Del 9 al 19 seguimos corriendo por un bosque muy chulo, reconozco que me encantó el lugar (había foros donde la gente decía que era un rollo, no para mí) y cada parcial sigo por debajo de lo más optimista, por lo que en parte bien, pero la incertidumbre me acojona un poco, por lo que pueda pasar a partir del 30. Aún así, voy corriendo a 4:39 muy cómodo y sin sensación de ir forzado.

Km 20 en 1:33:29 frente a los 1:34:40 (1:11 menos que el ritmo de 3:20!!!!), buffff mucho respeto, salimos del parque y empezamos el camino de vuelta por la ribera del río. En un momento dado, al intentar subirme el pulsómetro que continuamente se me va bajando (suponque que por la vaselina), éste se me desabrocha y tengo que ponérmelo como buenamente puedo (1ª incidencia en carrera superada). Como bien ha comentado Pep, el camino por el lateral del río está bien pero al pasar por tantos túneles, vas haciendo toboganes que dejan las piernas tocadillas, sin contar el hecho de que un túnel tiene casi un km, por lo que si sufres de claustrofobia no es el mejor sitio para correr. Aún así, los parciales siguen cayendo bastante regulares: 


50:23:200:23:200:04:40
100:46:420:23:220:04:40
151:09:590:23:170:04:39
201:33:290:23:300:04:42
251:56:580:23:290:04:42
302:20:560:23:580:04:48


Sólo del 25 al 30 me he acercado a los 24', el resto como un reloj por debajo de los 23:30. En este km me encuentro con Edgardo, un argentino que el día anterior me encontré en el metro y estuvimos hablando un poco acerca de la carrera. La verdad es que, en ese sentido he vivido la carrera de una manera diferente. Dada la casualidad de encontrar a una persona entre 40.000, decido correr junto a él mientras vamos charlando tranquilamente, aunque tras 2-3 km en los que veo que mira demasiado el reloj, le comento cual es su objetivo y veo que también es 3:15, por lo que tomo mi tercera decisión sabia y al poco lo dejo marchar, aunque esos km me han servido para mantener el ritmo y hacerme pasar el rato. Al final hizo 1:36, así que veo que hice bien.



Km 30, objetivo más optimista 2:22:00, real 2:20:56, por lo que tengo 1:04 para gestionar ahora que empieza la verdadera maratón. En este punto empiezo a cuestionarme si mi objetivo es el 3:24 o puedo ir a por el sub 3:20. La verdad es que me noto que voy como una moto, así que, viendo que no he de forzar mucho, decido ir a por el sub 3:20, en ese momento un valor conservador, ya que veo que, si bien no me veo llegando al 3:15, sí hacer sub 3:18 si todo va bien pero no creo que valga la pena arriesgar la carrera por pasar de 3:19:59 a 3:18:00.

En el 30, en el avituallamiento le pego un puñado a un cajón de pasas que me harán de complemento de los geles y del inexistente desayuno y empiezo a poner todos mis sentidos alerta para detectar posibles malfuncionamiento de mi cuerpo, rampas, etc., pero por ahora todo bajo control, sin síntomas de nada por lo que preocuparse.

A partir de ese momento mis ánimos están por las nubes ya que cada vez la distancia a la meta es menor y sigo con un margen que jamás habría soñado. Entramos en el segundo parque y ahí me doy cuenta de mi forma física, ya que aunque crea que no voy muy rápido, no paro de adelantar gente sin parar, de hecho entre el km 30 y meta adelantaré a 1200 personas, así que nada mal, por lo que veo que físicamente estoy muy muy bien.

Pasan los km dentro del parque, subo la rampita rompe-piernas sin excesivos problemas y sobre el km 37 se me sale la cadena del reloj, ¿mierda!, por más que intento arreglarlo en carrera no hay manera, el pasador ha quedado torcido y no puedo hacer nada, así que decido hacer los últimos km con el Garmin en la mano. A estas, en un momento dado veo que he parado el crono, así que a partir de ese momento no sé cuantos segundos habré perdido realmente, pero bueno, no viene de ahí.

Los km 38 y 39 los cadáveres caen a dos manos, ya que los hago a ritmode 4:35 y ¡¡¡¡4:29!!!!, saco la calculadora y veo que el sub 3:20 es un hecho más que asegurado, por lo que decido relajarme y correr esos últimos 2 km sin ningún tipo de presión a 4:41 y 4:54, disfrutando del momento y del ambientazo que hay en la parte final de la carrera.

Aquí ya no miro el reloj, tanto da 3:19 que 3:18, lo importante es que no he sufrido absolutamente nada, ha sido una carrera la mar de placentera, sin dolores y la he disfrutado como pocas veces lo he hecho y del muro, ni de lejos. No he tenido ni el mínimo bajón de 300m que tuve en Barcelona.

Al llegar a la meta paro el crono unos segundos más tarde para compensar la posible pérdida de tiempo, pero el simple hecho de ver un 3:1x me deja boquiabierto. En el día de hoy iba a buscar, si todo iba genial el 3:24 y ahí estaba yo con 3:19:02 que al final han sido 3:18:51!!!!!. Por lo visto no llegué a parar el crono casi nada.



Conclusión: Carrera increíble, recorrido genial, temperatura perfecta y organización de 10, la única pega los franceses que, pese a correr 40.000 personas, sólo animaban a 1, un tal Allez!!!!!

No sé cuando, pero repetiré, de eso no tengo dudas.



Como colofón final, Pep también consiguió su sub3:00 (de eso nadie tenía dudas, la verdad), así que la aventura parisiense ha sido perfecta!!!!!!.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Maratón de Barcelona 2013 By Raül

De todos es savido, que yo, hace 2 años, no me hubiera planteado un reto de este calibre. Incluso, después de haberlo realizado, no se si soy capaz de valorarlo en su justa medida. Supongo que el tiempo y el compartir experiencia con otras personas, me dará una perspectiva mejor y quizás pueda llegar a saber exactamente el valor de lo conseguido.
42km…… 42 kilómetros y 195 metros para ser exactos. UNA MARATON!!!!
Esto nada tiene que ver con cualquier otra carrera de las que he disputado anteriormente. No puede compararse. Ni en el “pre”, ni en el ”durante”, ni en el “post”. Todo es diferente. Todo es singular. Todo es…… indescriptible. Lo vives, lo disfrutas, pero cuesta mucho poder expresar todo los que sientes.
Desde la perspectiva que me dan los casi 10 días desde que la corrí, espero no caer, ni en a eufória y sufrimiento de la sensación justo al terminar, ni en la tranquilidad y la calma que te da el tiempo. Ni sólo en lo bueno, ni sólo en lo malo. Espero encontrar ese punto donde poder transmitir todo lo que siento.
No he sido completamente consciente de lo que significa una Maratón hasta que he podido participar en una. Mi primer Maratón.
Para mí, esta prueba no empezó el Domingo 17 de Marzo a las 8:30 de la mañana. En mi caso, empezó 10 semanas antes. Un estricto plan de entrenamiento (eternemente agradecido al gran Pep), que finalizó con el extasis de 42,195km por las calles de Barcelona.
Diez semanas, donde toda mi familia han estado entrenando conmigo. 4 días de entrenos semanales, levantándome a las 5 de la mañana unos días y acostándome a la 1 de la madrugada otros, con el fin de seguir el plan trazado. Fines de semana pensados y organizados por y para la carrera del domingo. Sitges, Terrassa, Granollers, Barcelona, Maratest en Badalona y Cambrils. Todas ellas con el apoyo incondicional de mi familia. Todos los domingos durante 3 meses. Todos. Y al final…………
Llega el gran día. No podemos decir que las tres semanas previas hayan sido una balsa de aceite, ya que casi no he podido dormir y he trabajado más horas al día que las que tiene. Por un lado pienso que no he podido descansar lo suficiente como para afrontar esta carrera, pero por otro, igual he conseguido desconectar y no pensar en demasía en la carrera.
Viernes al mediodía. Después de intentar cuadrar horarios de trabajo, entregas de ropa, videoconferencias y reuniones con unos Turcos de EEUU, coincidimos Pep, Carlos, Marcos y yo en la Fira del Corredor, para recoger los dorsales. Aquí ya se vive el ambiente. Se palpa. En las tres últimas semanas, es el primer moemnto que empiezo a ser consciente a lo que me enfrento el Domingo. Recojo mi dorsal. El 4062. Cambio de mostrador y la camiseta. Blanca y fea. Primera decepción. Pero no importa, es mi primer Maratón, así que me compro una camiseta más…… bonita. Ahora sólo queda descansar el sábado, y deseoso que llegue el domingooooooooo!!!!!


5:00 am. Suena el despertador. He dormido sólo en casa. Organizamos que para que Anna y los niños no tubieran que madrugar, domrían en Barcelona.  Lo pensé por ellos, pero en el fondo creo que ha sio una buena decisión. Estava demasiado nervioso como para hablar con nadie, escuchar a nadie, ni comprender a nadie.
Empieza el ritual. Ducha. Desayuno. Ya no tomo leche. Desde hace un mes, que no tomo leche ni el día de antes ni el dia de la carrera. He evitado los problemas de descomposición durante las carreras. Debo desayunar un poco más que de costumbre. Pero tengo el estómago cerrado. Tengo dificultad en comerme las dos tostadas con mermelada y el café sólo. Los nervios. Mis “Papallones”. Hoy hay muchas. Me voy a vestir. Todo preparado.
Al llegar a Barcelona, aparcamos (es una suerte poder hacer hacerlo en casa de mis suegros a menos de 1km de la salida). Seguimos con nuestro ritual y nos dirigimos a la cafetería a tomar el último aporte de cafeína y parte de la CRV a visitar puntualmente al Sr. Roca. Mi hermano, que ha venido con su bicicleta, nos informa de su particular maratón. La intención en verme en 14 puntos del recorrido. Y doy fé que lo consiguió.La semana anterior, realizó el recorrido a la misma hora para ver los contrastes de luz, el tiempo ha cada punto. Lo llevava mejor preparado que yo!!.
Calentamos hasta la salida y para el cajón. Azul. Entre 3:15 y 3:30. Dejamos a mi hermano, a Pep con la élite y Carlos y yo no vamos para el cajón. En ese momento, muy nervioso. Suerte de Carlos al estar a mi lado. Ahora se, que él en ese momento me hizo tranquilizarme. Por fin!!! Suena Barcelona de Mercury y Caballé y salida de las sillas de ruedas….. 3 minutos y 1ª salida. Salen la élite los amarillos y los rojos. Antes de los 5 minutos…. SALIMOOOOOOSSSSSSSSS.

Ya ha empezado. El primer kilómetro me acompaña Carlos. Todo esto me ayuda a empezar más tranquilo, pero a los 10 segundos, me dice: “Cuanta gente!! Tu que sabes, ves tirando que yo te sigo” que yo te sigo!! Pero si eres tú quien debes ir 15 segundoss por kilómetro más rápido. Encaramos Ctra de Sants sin aglomeraciones y a la altura del Mercat d’Hostafrancs, Carlos se despide, me desea suerte y empieza su entreno. Yo me coloco a la izquierda. Estoy llegando a la altura del Carrer Olzinelles. Busco a Anna. Y efectivamente, la veo junto al Roger. Les saludo. Me chillan. Subidooón!!. En ese momento, estoy convencido de que acabo la carrera. Llevo 1 km, me quedan 41, pero estoy convencido. Intento coger ritmo y rápidamente cojo ritmo de carrera, Km2, km3 encarando Av Madrid. Intento poco a poco ir colocándome a la derecha. Km 4 girando para Numancia y prmer punto donde veo a mi hermano. Saludo. Y primer tramo de subida. Noto la pendiente de la calle Numancia y pienso, que estamos en el km 4 y me cuesta, que pasará a partir del 30. No me obsesiono, y empiezo a coger un ritmo muy cómodo. Paso por el Camp Nou y me gusta. Me emociona correr por el Camp Nou. Hasta ahora estava pendiente de no empezar muy rápido. Pep me dijo que mejor coronar el Camp Nou hasta diagonal a 5:15 que a 4:50. Y estava a ritmo de 4:50. Veremos a ver si no me penaliza luego…. En plena diagonal, uno que corría con cascos, se gira y dice que está escuchando la radio y nos informa que Raikonen a ganado la carrera de Australia y que Alonso es segundo. Es lo último que pensava escuchar.  Km7, Km8 y encaro Av. Sarriá hacia el 9. Llego al giro con Calle París y vuelvo a ver a mi hermano. Va consiguiendo llegar a todos los puntos!! Regulo bastante en la bajada y el segundo 5000 me sale más lento. Paso el 10k en 50 minutos justos. Debo aumentar el ritmo.

Empiezo el segundo 10.000 subiendo el ritmo y esperando ver a Anna y al Roger en la Gran Via. Veo que sin querer subo el ritmo de carrera. Se nota que ahora es bajada. Me pongo a 4:50 facilmente. Paso por el Arenas y encaro la Gran Vía. No se en que punto exactamente estará Anna, así que me pongo por la izquierda y voy más pendiente de la gente que de mantener un ritmo. Finalmente los veo a la altura de Urgell. Nuevo subidón!!! Eso me da fuerzas.  Noto que voy algo más rápido pero sin probemas. Poco mas adelante, justo antes de Paseo de Gracia, me saluda Raquel y los niños. Al girar por Paseo de Gracia, veo a mi padre, a la Marta, a la Alba y a Nil. Los veo cuando ya he pasado. Me giro, chillo y levanto la mano. Parece esto como correr por pista, cada kilómetro vea a alguién. Y ahora en la Pedrera mi hermano otra vez. Y efectivamente. Allí está animando y foto con la Pedrera de fondo. Después de tanta afición y adrenalina paso este tercer 5000 en la calle rosellón en 24:48, recuperando el ritmo necesario con un acumulado de 1:14:48 a 4:59. Vamos bien!!!


Otro punto emocionante. Al girar por el Carrer Sardenya y ver la Sagrada Família, me emociono. Busco a mi hermano y no lo veo. Pienso, no puede llegar a todos los puntos. Pero justo pasar el templo, en la esquina con Mallorca, allí estava. Foto y animos. Encaro Calle Valencia con buenas sensaciones y esperando ver a Anna en Meridiana. Y Efectivamente, Allí estaban. Animando incndicionalmente. Casi 20km y no me han dejado sólo en ningún momento. Esto es mejor que cualquier Gel o vitamina. Encaro Meridiana, pensando que ya sólo queda esto de subida y de dureza. Sigo bien y subo a buen ritmo detrás de las Minnies y las paso antes de llegar a Concepción Arenal. A media subida, nuevamente mi hermano me vuelve a gritar y animar. No lo esperaba aquí. Hago este 5K en 24:14 y paso por la media en 1:44:25. Justo en lo que debía pasar, aunque no he podido coger margen para entrar tranquilamente con los niños y conseguir el tiempo deseado. En este punto, bien de piernas y bien de cansancio.
Pasada la media, bajando Meridiana, me cruzo con Javi que la va subiendo. No lo veo mal del todo, aunque luego me explicó que en ese punto estava pensando en abandonar. Poco después, SORPRESA!!! Al girar hacia Felip II, me toca por detrás Carlos!!! Una de dos o yo voy extremadamente rápido, que no, o le ha pasado algo. Y efectivamente, no contento con la conversación antes de la carrera, tuvo que ir a decirle cuatro cosas bien dichas al Sr.Roca, justo alpasar por la Sagrada Familia. Sagrada conversación tuvo. Despues de conversar brevemente, me vuelve a dejar y sigue con su entrenamiento “interruptus”. Y sigo a lo mio, manteniendo el ritmo. Gran Via, Rambla Prim y sin querer, ya llevamos 25 km. Este pacial en 24:16. A 4:51, el parcial más rápido y cómodo.
Justo en este punto, noto un pequeño tirón en el isquio de la pierna izquierda. Tengo la sensación de que puede romper.  Pruebo mantener el ritmo, pero me tira demasiado, así que bajo el ritmo unos 5 segundos por km y mejora la molestia. Empiezo a subir Diagonal y voy notando la molestia en el Isquio. Es el primer momento que pienso que hay una posibilidad de que no pueda seguir. Y me fustro, pero me conciencio que no puede ser. Aquí ya veo a todo el mundo. Primero a Pep. Luego, nuevamente a mi hermano, Anna, Roger, Marta, Alba, Mi Padre, Raquel y los niños. Subidón, Subidón. Aquí me convenzo. Si me rompo, llego como sea!! Giro y empiezo a bajar por Diagonal. Nuevamente todos animando, y Pep que se pone tras de mi corriendo. Comentamos lo del Isquio y que al correr en mala posición, se me están cargando demasiado los abductores. Pero por lo demás bien.  Llegando al km30, Carlos con su cámara. Tengo más seguimiento que el Leiva. Increible.  Este parcial en 25:06. Me he puesto en 5min el km, pero empiezo a notar el cansancio en las piernas. No sobrecarga, ni rampas. Noto los abductores que cada vez tiran más.
Empezamos la parte más dura de la carrera. La zona litoral.Primero por pasar del km 30, es la parte con menos público, viento en contra. En este parcial, los 3 primero kilómetros intento subir el ritmo, y consigi hacer esos 3 a una media de 4:50, pero noto que las molestias van a más. Justo al final del Pg. Garcia Faria, vuelvo a encontrarme a mi hermano. Está consiguiendo llegar a cada uno de los puntos que se propuso. Yo sigo a lo mio y empiezo a sufrir . Veo que corro descompasado por el dolor en la parte posterior del muslo y vuelvo a un ritmo mas tranquilo de 5:07 el km., asi que paso el km 35 en 2:54:07.
Subiendo Marina, me lo cojo con tranquilidad. Estoy viendo demasiados “cadáveres” y no quiero ser uno de ellos. Pienso en llegar a Plaza Catalunya y luego ya esta todo hecho. Al pasar por Arc de Trionf, mucha gente. Que emoción. Y nuevamente mi hermano haciendo fortos. También se está currando una buena jornada de domingo!!

Ronda San Pere plagada de gente y al llegar a plaza Catalunya, se desatan todo el sufrimiento y penurias. Entrando por Portal de l’Angel, es cuando soy consciente de que voy a terminar la Maratón. Con el gentío me emociono y casi empezo a llorar. Decidí en ese momento, que debo disfrutar de los últimos 5 kilómetros. Que me lo merezco. Las piernas me duelen mucho y casi no las siento. Pero mantengo el ritmo de 5 min el km. Pasamos por la Catedral y vuelve a aprecer mi hermano. Increible.
Llego a Via Laietana y sin querer vuelvo a aumentar el ritmo, pero sólo un espejismo y gracias a la glucosa que me pasaron. Cuando Veo Colón al fondo vuelvo a emocionarme. Todo el litoral, hasta el Paral.lel, parece un campo de batalla. Corredores parados estirando, sentados en el suelo, andando. Todos con cara de sufrimiento y muchos de ellos con rabia de no poder conseguir su objetivo, faltando sólo 2 kilómetros. En el km 39 lo paso en 3:15:00, justo antes de pasar por Colón. En ese moento bajo el ritmo por completo y empieo a disfrutar de los 3 últimos kilómetros.
Justo al empezar el Paral.lel, subo los brazos y empezo a llorar. No lo recuerdo con claridad, pero diría que subí todo el Paralelo con los brazos en alto. Los ánimos de los aficionados gritando tu nombre hacen que te ruborices. Es una emoción indescriptible. Pero nada comparado a cuando llegando a Plaza España, ver a Anna, Roger y al Miquel. Lo recuerdo ahora y vuelvo a llorar. Todos gritando tu nombre, los dos niños de la mano. Se que toda la Avda Maria Cristina, subí gritando y disfrutando el momento. Con el Roger y el Miquel de la mano y mi hermano haciendo fotos. Indescriptible.

Acabo mi primer Maratón en 3:32:16. Entrando con mis hijos. Anna y Roger, animandome por todo el recorrido.  Quien se lo iba a decir a un tio que hace 2 años pesaba 150KG.
Gracias a todos por acompañarme en esta aventura.
A Anna Roger y Miquel, por aguantar el día a día, los entrenos a deshoras, los fines de semana condicionados. Por todo. Os quiero.
Al resto de la familia, por sufrir junto a mi y por mi.
A Pep, Carlos, Josep y Marcos. Sin vosotros, tenerlo por seguro, no lo hubiera conseguido. No lo hubiera intentado.
Gracias a Todos
SOY FINISHER!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!